MAS DERECHOS, MAS IGUALDAD
El 8 de marzo es una fecha que marcó la historia del trabajo y la lucha sindical en el mundo entero; recuerda la lucha de las mujeres trabajadoras por el reconocimiento de iguales salarios y condiciones laborales que las que tenían sus compañeros, los varones.
En nuestro sindicato las mujeres de todo el país nos juntamos anualmente en el hotel Presidente Perón de Huerta Grande para conmemorar esta fecha y reivindicar la lucha, derechos y conquistas alcanzadas por las mujeres que nos precedieron.
En el caso de las trabajadoras de la actividad fiscal hace tiempo que esta conducción vino marcando una agenda de género que se ve plasmada en los lugares que ocupan nuestras compañeras en el secretariado nacional y en los derechos y garantías que se consiguen para las trabajadoras de la actividad.
En ese sentido somos uno de los primeros sindicatos del país que logramos incorporar a nuestro Convenio Colectivo los preceptos establecido en el Convenio 190 de la OIT que reconoce como un derecho el trabajar en un ambiente libre de violencia y acoso incluída la violencia y el acoso por razones de género. Este logro se consiguió en la paritaria del 2022, siendo un gran paso para los trabajadores y en particular las trabajadoras de nuestro Organismo.
En esa misma negociación paritaria también se logro ampliar las causales por las cuales una compañera puede pedir licencia cuando esta sufriendo violencia. Con anterioridad solamente se podía pedir días de licencia en caso de sufrir violencia doméstica, ahora se contemplan todo tipo de violencias tipificadas en la Ley 26.485 que es la Ley de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres. Esta licencia se se paso a denominar “Licencia por violencia de género” y es con goce íntegro de haberes.
Esta ampliación de derechos marca la presencia activa del sindicato en la vida laboral de los y las trabajadoras mejorando en particular la situación de las mujeres en los distintos ámbitos de trabajo y creando herramientas y garantías para poder ejercer el trabajo en igualdad de condiciones que los compañeros varones.
Producto de la continua y larga participación protagónica en los espacios de poder de nuestras compañeras dirigentes, es que también el año pasado se modificó nuestro estatuto social incorporando en él la perspectiva de género.
En ese sentido el estatuto es el texto que ordena toda la vida social de nuestra Organización y debe reflejar también las nuevas realidades que nos atraviesan como sociedad y como la comunidad que somos las y los trabajadores fiscales.
Estas modificaciones se dieron luego de un enorme debate de meses que se llevó a nivel nacional a través de las seccionales que lo componen.
Podemos decir que se incorpora en el texto de su ordenamiento un lenguaje inclusivo pero es más que eso porque reconoce en ese decir que no solo los varones ocupan cargos de conducción, funciones y lugares dentro de la nuestra Organización sino también las compañeras mujeres. De ahí la importancia de la modificación porque lo que no se menciona de alguna manera no existe y lo cierto es que hoy la participación de las mujeres en los distintos estamentos de nuestro sindicato es activa y creciente.
Otro de los avances en materia de género es la creación de una secretaría como la que existe hoy en la Mesa Directiva pero a nivel local, de las Seccionales; denominada después de la modificación “Secretaria de Igualdad de Oportunidades y Género”. Esta nueva secretaría es un espacio para seguir reflexionando y debatiendo en ámbitos más chicos, en los espacios locales las problemáticas que atraviesan las mujeres y diversidades. Es decir con esta incorporación a partir de ahora en cada una de las Comisiones Directiva de las Seccionales habrá una nueva secretaría fomentando el surgimiento de nuevas dirigentes y la mayor participación de las compañeras mujeres en la actividad gremial
En la línea que venimos describiendo un avance significativo en materia de género fue incorporar como causal de expulsión, dentro del capítulo de medidas disciplinarias, las conductas que impliquen acoso, violencia o discriminación en razón del género para así prevenir, erradicar y sancionar la violencia contra las mujeres en los ámbitos gremiales en los cuales las mujeres desarrollan sus relaciones interpersonales.
Esta reforma estatutaria no solo se adecua y es el reflejo a los tiempos contemporáneos sino que principalmente fomenta la actividad gremial en condiciones de equidad y promueve el desarrollo de acciones que buscan el crecimiento de la participación de las mujeres en la vida sindical.
Esta conducción se propuso visibilizar y promover la participación de las mujeres bajo el lema “Somos más protagonistas” y a lo largo de este tiempo hemos ido removiendo los obstáculos que existían en las estructuras gremiales para que se de una participación plena de las compañeras mujeres en nuestro gremio; aún queda camino por recorrer pero hemos avanzado firmes y convencidos en que esa es la dirección correcta.