“Mi nombre es Flavia Alejandra Pagliaricci, nací en Rio Cuarto, el Imperio,  donde vivo desde siempre” así se presenta nuestra querida compañera, sindicalista ella, actualmente vocal de Mesa Directiva Nacional y secretaria Adjunta de su Seccional Rio Cuarto.

Su lugar en el mundo es su ciudad porque así lo refiere cuando nos habla de ella “¡¡Mi Rio Cuarto es especial!! Es nuestro Imperio, lo elegí para estudiar, para formar mi familia y es el lugar que elijo para seguir estando” Nos cuenta que es una ciudad tranquila de 180.000 habitantes, donde todos se conocen, va casi todos, aclara. Y sobre el final nuevamente vuelve a decirnos “Es mi lugar”.

Flavia empezó sus estudios de Ciencias Económicas en la Universidad Nacional de Rio Cuarto y esto le permitió en el año 90 presentarse al llamado de personal que la Dirección General Impositiva estaba realizando para esa época. Ingresó en la primera tanda, el 16 de octubre, con 30 compañeras y compañeros más. En esa misma fecha pero en la ciudad de La Plata, ingresaba también Guillermina Ibañez, otra compañera sindicalista y secretaria de la Mesa Directiva Nacional, casualidades, causalidades, ¿quién lo puede saber?

Durante la conversación nos cuenta que entro en la época de los “sabuesos”, y las y los que entraron pasaron a serlo también, porque fueron los 30 a fiscalización externa. Lo primero que tuvieron que hacer fue controlar la RG N° 3419, es decir, rastrillajes de facturación. Luego por el año ´92 se creó el sistema 2000 y entonces algunos de ellos, entre los que se encontraba Flavia, pasaron a formar parte de ese nuevo equipo y proyecto dentro del Organismo. “Toda mi trayectoria dentro de la AFIP fue en la Agencia Sede, en el área de recaudación y nunca más me moví de ahí”; así nos cuenta su paso por el Organismo.

Después llego su militancia gremial, aunque antes tenemos que hacer un parate y contar cómo fue su paso por la Universidad, porque allí también le dedico parte de su tiempo personal a la militancia estudiantil. En la época en que Flavia estudiaba y militaba era difícil escuchar, como sucede ahora, que se hablara del patriarcado, de deconstruirse, de alcanzar la igualdad de género. Así de difíciles eran esos tiempos para todas las mujeres y por tanto para Flavia que se dedicaba a la política. Aun así, y como lo pensamos muchas de nosotras, la vida se trata de lucha, y por eso Flavia siguió militando hasta romper con esos techos que muchos optan por no ver pero que sin embargo estan ahí, presentes, como barreras que impiden nuestros crecimientos, esos techos de “cristal” que los dieron en llamar. Con los techos ahí en la cabeza y su incansable perseverancia y convicción de que la participación de las mujeres en política es tan natural y necesaria como lo es la participación de los hombres, es que en el año 89, ella es electa presidenta del Centro de Estudiantes para luego en el año 1991 llegar a ser la primera presidenta de la Federación Universitaria. Y son tan verídicos los techos de cristal que en 30 años solo una compañera más, además de Flavia, lo ha logrado romper.

Nos interesa saber cómo se acercó al gremio, entonces le preguntamos: “Hace aproximadamente 20 años que trabajo en el sindicato” nos cuenta “en nuestra Seccional (Rio Cuarto) nos juntamos un grupo de compañeros que veníamos desde la Universidad, generacionalmente compartíamos los mismos valores, las mismas ganas y armamos un equipo de trabajo”. En su día a día como sindicalista entiende que además de defender los derechos de los compañeros y compañeras y el tema salarial, “nosotras estamos y trabajamos para ocuparnos de todo tipo de problemáticas que tienen nuestras compañeras y compañeros: desde los trámites y dudas que genera la jubilación hasta acompañarlas en alguna enfermedad, de eso se trata la tarea de una sindicalista”.

La participación de la mujer en el gremio también ha cambiado señala “a nivel sindicato se está estimulando la participación de las compañeras; debe venir desde un trabajo primero con el delegado, luego las seccionales para desembocar en lo que es la Mesa Directiva Nacional. Y hoy se da a la inversa, en la Mesa Directiva se está cumpliendo y desde ahí se proyecta a todas las seccionales y delegados” … “hoy vemos a un montón de compañeras que están ocupando los lugares pero que los están ocupando y se están haciendo cargo, están decidiendo en forma conjunta con los compañeros”.

El paso de los 20 años desde que comenzó en la actividad gremial hasta la actualidad le permite analizar y saber que ese es el resultado de mucho trabajo realizado “Hoy no solo estamos sino que también participamos y somos parte”.

Señala que aún “queda un montón por delante para continuar trabajando” y reflexiona con una mirada integradora, entendiendo que en la complementariedad del hombre y la mujer están las sindicalistas y los sindicalistas que los y las trabajadoras necesitan: “…es importante que hayamos podido ver en ese sentido, de que nos complementábamos, de que en algunas funciones esta bueno que estuviesen los compañeros y en otras las compañeras, con una misma mirada, con una misma política”. Y esta idea la remarco en distintos momentos a lo largo de toda la entrevista, explicando que no es en el sexo de quien ejerce la política donde se debería ponerse la mirada, el acento, sino en el proyecto político que viene a desarrollar. “lo que deberíamos trabajar a futuro (hombres y mujeres) es por tener un mismo proyecto”…“que puedan llegar todas las mujeres y todos los hombres con un mismo proyecto, un proyecto compartido y que no sea que simplemente por cumplir el cupo y que haya mujeres o hombres que lleguen sin tener ese mismo horizonte. Que sea un proyecto, si, compartido”.